Viernes , 8 de Agosto de 2008 |
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En caso de que un empleado, un titular de una tarjeta de crédito o personas independientes que no sean comerciantes se vean en una situación donde sus ingresos definitivamente no alcancen para pagar sus obligaciones con el sistema financiero, podría tener un salvavidas que le evitaría ir a la quiebra. Ese es el objetivo del proyecto de ley para personas insolventes que presentó en el Congreso el representante Simón Gaviria Muñoz. "Se han tomado todas las previsiones del caso para que por ningún motivo y en ningún momento de este proceso se incentive la cultura del no pago. Este proyecto busca todo lo contrario. Cuando una persona llegue a acogerse a estos beneficios no solo tendrá derechos, también deberes", afirma el representante.
Agregó que el potencial beneficiario deberá reunir seis requisitos. Uno de ellos es que cuando las obligaciones vencidas representen el 80 por ciento o más del total de su pasivo, no se podrá solicitar el trámite de negociación de deudas. "El deudor que se acoja al trámite de negociación de deudas, solo lo podrá hacer por una sola vez cada seis (6) años en la forma y términos previstos en esta ley", advirtió Gaviria Muñoz.
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